La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha comenzado a impulsar una serie de reformas legales con la finalidad de transformar y fortalecer el sistema de seguridad e inteligencia del país, esto debido al contexto de inseguridad ciudadana y los retos entorno al crimen organizado por las crecientes amenazas. Estas reformas abarcan reformas constitucionales y estructurales dentro de las instituciones de seguridad mexicanas, teniendo por objetivo potenciar la prevención y el combate del crimen.
Iniciativas claves de la reforma
1. Modificación del Artículo 21 de la Constitución
La reforma al Artículo 21 busca dotar a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de facultades de investigación en coordinación con el Ministerio Público. Esta modificación permitiría a la SSPC involucrarse activamente en la investigación de delitos, lo cual supone una descentralización parcial de las funciones exclusivas del Ministerio Público. Esto podría agilizar los procesos de investigación al permitir que las fuerzas de seguridad actúen con mayor inmediatez en los casos de delincuencia organizada, siempre bajo la supervisión legal del Ministerio Público para garantizar el respeto a los derechos humanos y evitar abusos.
2. Creación del Sistema Nacional de Inteligencia
La iniciativa para establecer un Sistema Nacional de Inteligencia representa un esfuerzo para mejorar la recopilación, análisis y uso de información en todas las entidades de seguridad. Este sistema buscaría coordinar los esfuerzos de inteligencia de manera centralizada, integrando la información proveniente de la SSPC, el Ejército, la Guardia Nacional, entre otros organismos. La meta es anticiparse a las amenazas mediante un enfoque preventivo basado en inteligencia de alta calidad. Este sistema también permitiría mejorar la eficiencia al reducir redundancias y optimizar el uso de recursos en las distintas agencias de seguridad.
3. Establecimiento de la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial
Para fortalecer aún más las capacidades de inteligencia en el combate al crimen organizado, dentro de la SSPC se establecerá la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial. Esta subsecretaría desarrollará estrategias basadas en inteligencia policial, adaptadas a la evolución del crimen organizado y centradas en la ciberseguridad y otros aspectos modernos de la delincuencia. El objetivo es contar con una institución especializada que pueda coordinar las operaciones de investigación y desarrollar respuestas estratégicas ante los cambios en las tácticas criminales.
Objetivos de las reformas
1. Fortalecimiento de la Inteligencia y la Investigación: Con las nuevas facultades y estructuras, se espera que el Estado mejore su capacidad para identificar, prevenir y combatir delitos, especialmente los relacionados con el crimen organizado y el narcotráfico.
2. Mejora de la Coordinación Interinstitucional: La creación del Sistema Nacional de Inteligencia también tiene el objetivo de facilitar una cooperación efectiva entre diferentes entidades de seguridad. Esto evitaría la duplicidad de funciones y garantizaría que las respuestas a amenazas sean rápidas y eficaces.
3. Adaptación a Nuevas Amenazas: Estas reformas buscan que el marco jurídico evolucione junto con las nuevas formas de delincuencia, como el crimen cibernético, garantizando que las instituciones estén preparadas para enfrentar no solo las amenazas tradicionales, sino también los delitos que surgen con los avances tecnológicos.
Conclusión
Las reformas muestran una respuesta firme del gobierno para frenar la violencia y criminalidad en el país. El crimen organizado ha evolucionado en complejidad y alcance, siendo que muchas de estas organizaciones incluso han traspasado la frontera, impulsando actividades como el narcotráfico, extorsión y crimen cibernético. Es por ello, que la reestructuración de los organismos de inteligencia y la inclusión de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana en la investigación de delitos buscan enfrentar estas amenazas con un enfoque moderno, eficiente y estratégico.
El éxito de estas reformas dependerá de una implementación transparente y coordinada que priorice no solo la efectividad operativa, sino también el respeto a los derechos humanos y la confianza ciudadana en las instituciones. México, al modernizar su enfoque de seguridad y adaptarse a las nuevas realidades del crimen organizado, aspira a construir una sociedad más segura y resiliente, donde el Estado pueda proteger eficazmente a sus ciudadanos y restaurar la paz en áreas afectadas por la violencia.
Redacción Goberna México 🇲🇽