Políticas migratorias de Trump 2025: gran impacto en Latinoamérica
Redacción Goberna
Tabla de contenidos
Las acciones de la administración Trump han dejado huellas profundas en países como México, Guatemala, Honduras, El Salvador y Colombia, provocando tensiones diplomáticas y reconfigurando la cooperación regional.
I. Introducción
Las políticas migratorias impulsadas por Donald Trump han supuesto un gran impacto en Latinoamérica, no solo por los controles en la frontera sur de Estados Unidos, sino también por el modo en que han condicionado la ayuda económica y la colaboración bilateral. La reciente controversia con Colombia (registrada el 26 de enero de 2025) se suma a una larga lista de tensiones que abarcan a México, Guatemala, Honduras y El Salvador. A continuación, revisaremos los ejes más relevantes de este fenómeno que trasciende fronteras y analiza cómo la “tolerancia cero” ha alterado las dinámicas diplomáticas y de seguridad en la región.
II. Contexto de las tensiones en las políticas migratorias
México y la frontera sur
Bajo la amenaza de imponer aranceles, la Casa Blanca logró que el gobierno mexicano intensificara los controles migratorios, desplegando a la Guardia Nacional en la frontera con Guatemala.
Medidas como el programa “Quédate en México” (MPP) obligaron a miles de solicitantes de asilo a esperar su proceso judicial en territorio mexicano, generando hacinamiento y crisis humanitaria en ciudades fronterizas.
Centroamérica ante la presión unilateral
Guatemala, Honduras y El Salvador afrontaron recortes de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) si no frenaban las caravanas migratorias.
Los acuerdos de “tercer país seguro” implicaron que quienes buscan asilo en Estados Unidos deban gestionarlo primero en países que carecen de infraestructura para atender a esta población, provocando tensiones y críticas a su legitimidad.
Colombia y la crisis de enero de 2025
Aunque no pertenece al corredor migratorio centroamericano, Colombia se vio presionada para revisar las condiciones de visado y el combate a las drogas, vinculando la migración con posibles amenazas terroristas y de narcotráfico.
La amenaza de recortar fondos dirigidos a la sustitución de cultivos ilícitos y al desarrollo rural reavivó la polémica sobre cómo las políticas migratorias de EE. UU. pueden influir en la soberanía y la estabilidad interna.
III. Repercusiones principales
Diplomacia condicionada
Washington supeditó la continuidad de ayudas económicas a la adopción de medidas de control fronterizo y la colaboración en la reducción de flujos migratorios.
Este formato de presión aumenta la asimetría de poder en la región, obligando a los gobiernos a priorizar la contención antes que la búsqueda de soluciones de fondo.
Estigmatización del migrante
El discurso de “tolerancia cero” ha fortalecido la idea de que migrar es equivalente a delinquir, afectando la percepción de las comunidades latinas incluso dentro de Estados Unidos.
Para muchos países, esto se traduce en una imagen injusta que ignora las causas reales de la migración: pobreza, violencia y falta de oportunidades.
Fragmentación en la acción regional
Ante la presión de la Casa Blanca, cada país ha optado por negociar individualmente, debilitando el potencial de una estrategia colectiva que aborde las causas estructurales de la migración.
La falta de una postura unificada dificulta los esfuerzos de organismos regionales y socava los intentos por desarrollar una política migratoria integral y respetuosa de los derechos humanos.
Afectación de proyectos de paz y desarrollo
La reducción de la asistencia internacional en países como Colombia y varias naciones centroamericanas pone en riesgo programas de erradicación de cultivos ilícitos, desarrollo económico y reconstrucción del tejido social.
Paradójicamente, la desestabilización resultante puede incrementar los desplazamientos de población y nutrir la migración irregular.
Nuevas tensiones diplomáticas
El caso colombiano en 2025 evidencia que ni las relaciones históricas de cooperación quedan exentas de los roces generados por la “diplomacia de la contención”.
La imagen de Estados Unidos como socio confiable se pone en entredicho, mientras algunos gobiernos latinoamericanos buscan forjar nuevos acuerdos con otras potencias o bloques.
IV. Perspectivas y escenarios futuros
Persistencia de la presión unilateral
Un escenario posible es que continúe la estrategia de presión, manteniendo los recortes de ayuda y el endurecimiento de la política migratoria, con efectos impredecibles para la gobernabilidad interna de los países afectados.
Diversificación de alianzas
El descontento con las imposiciones podría impulsar a varios gobiernos a fortalecer vínculos con potencias como China o la Unión Europea, lo que redefiniría la geopolítica en Latinoamérica.
Coordinación regional renovada
Como alternativa, un bloque unificado que aborde de forma integral las causas de la migración —combatiendo la desigualdad, la violencia y la falta de oportunidades— podría contrarrestar el enfoque basado en la contención y aportar soluciones sostenibles.
Las políticas migratorias de Trump han remodelado el panorama geopolítico latinoamericano, evidenciando el poder que ejerce Estados Unidos al condicionar la ayuda financiera y diplomática. México, Guatemala, Honduras, El Salvador y Colombia muestran el abanico de reacciones ante una política exterior que prioriza la securitización sobre la cooperación y la visión humanitaria.
El reto para Latinoamérica reside en equilibrar las exigencias de seguridad con el respeto a los derechos humanos, la atención de las causas de fondo que empujan a la población a migrar y la búsqueda de una mayor independencia en la formulación de políticas. Un enfoque multilateral y la puesta en marcha de proyectos de desarrollo integral son claves para dar pasos firmes hacia la estabilidad y la reducción de la migración forzada.
Para profundizar en temas de geopolítica y estrategias de influencia
En este contexto, resulta relevante comprender cómo la manipulación mediática y el manejo de la opinión pública en las políticas migratorias pueden jugar un papel crucial en la aprobación o el rechazo de ciertas políticas migratorias. Para quienes deseen explorar con mayor detalle estos enfoques, puede resultar de utilidad consultar recursos especializados como:
Dichos materiales profundizan en las herramientas analíticas y las técnicas de inteligencia que explican, en parte, la dinámica de poder que caracteriza las tensiones migratorias.