Una especialización empresarial en la Ciencia Política
Uno de los más grandes prejuicios que se tiene en los círculos de autoridades políticas y de políticos candidatos es que los politólogos saben de política y saben de campañas electorales.
De hecho, este post, tiene como objetivo explicar a la opinión pública que el grueso de politólogos no participan en campañas electorales más que de forma indirecta o por requerimientos de los políticos quienes creen que los politólogos saben de campañas.
Los politólogos han decidido especializarse en gestión pública. Lo más probables es que sea por la seguridad laboral del sector público, así mismo que sus profesores dentro de la burocracia ha tenido mucha influencia en ellos: “formarlos para ser funcionarios públicos”. La segunda especialidad favorita de los politólogos es la política internacional, el sueño de ser embajador y viajar por el mundo. Y la última de las especialidades preferida es la estrategia política o la comunicación estratégica en política. ¿Por qué? Bueno, en resumidas cuentas, porque es una actividad estrictamente privada o lo harían free lance o mediante una empresa.
Por otro lado, han sido los publicistas, comunicadores, marketeros quienes han realizado estas labores llevándola al terreno de la simple publicidad comercial desconociendo la naturaleza de la política.
¿Qué perfil tiene el politólogo que es un estratega de campañas electorales especializado?Existen tres criterios importantes para definirlo: el 1ro es que es investigador, la tesis de licenciatura, maestría, papers o ponencias especializadas definen que sí conoce del área como profesional. Pero cuidado, hay muchos buenos académicos que nunca han estado en el campo de batalla, como conocer la teoría de todas las guerras y nunca se ha luchado contra alguien. Por otro lado si podemos estar seguros que un politólogo que ha hecho tesis, ponencias, charlas, conferencias en gestión pública, no podría ser autoridad en marketing político.
El 2do criterio es el campo o experiencia en campañas, podría ser un catedrático en una prestigiosa universidad, pero ¿Ha estado en alguna oportunidad en una situación real de campaña? Esto pasa muy a menudo. Sin embargo, cuando hablamos de experiencia no solo se refiere a ser asesor, es otro error. La experiencia es incluso en volantear, ser personero, operador, activista, agitador, son facetas que un verdadero estratega las ha vivido y puede conducir una campaña mejor.
El 3er criterio son las habilidades gerenciales. Difícilmente un as de la estrategia, tendrá dificultades con las relaciones personales, mezcla el fino sentido de la erudición con la intervención porque un estratega de campaña es un interventor, un Fouche, un Maquiavelo, un Heydrich, calculadores que tienen una extraordinaria capacidad de ejecución, operacionalización y eficacia política. No existe estratega de campaña tímido, timorato, así como desconocedor de la estrategia.
Por eso, si usted está buscando un asesor, si es politólogo es mejor y no estaría mal que revise su perfil académico, experiencia y trayectoria política. No deje su campaña en manos de improvisados. Ser politólogo no es sinónimo de estratega político.